La Laguna Grande es una laguna de origen glaciar y es la más grande y famosa de toda la Sierra de Gredos. Se sitúa dentro del llamado Circo de Gredos y está "vigilada" por las cimas de mayor altura de la Sierra, constituyendo uno de los parajes más impresionantes de Gredos.
La Laguna Grande de Gredos se encuentra a una altura de 1940 m. Presenta escasos nutrientes. Sus aguas transparentes se hielan en invierno, de tal forma que durante estos meses se puede atravesar helada sin ningún problema. Está rodeada por las paredes de las crestas de los 3 Hermanitos, Cerraíllos, el Morezón al este; por Risco Moreno y Cerro de los Huertos al oeste y presidida por el Almanzor al sur. Su diferencia de altura media con las cumbres que la rodean es de más de 450 m. Junto a ella se construyó en 1972 el refugio Juan Antonio Elola, donde se puede pernoctar en verano y algunos días del invierno, y punto de inicio de gran cantidad de rutas y escaladas por todo el Circo de Gredos.
Existen algunos mitos y leyendas sobre la Laguna Grande de Gredos. Se decía que "es una laguna muy profunda cuyo fondo llega al centro de la tierra", que "sus aguas al agitarse producen sonidos espeluznantes" y que "la zona de la laguna es origen de fuertes tormentas". Existe también una leyenda que se conoce con el nombre de "la serrana de la Vera" según la cual una mujer desaparecida en la comarca de la Vera de Plasencia, tras estar vagando por los campos de la región, acabaría por sumergirse en las aguas de la laguna para vivir en el fondo de la misma.
La excursión desde la Plataforma de Gredos a la Laguna Grande, sobre todo en primavera y verano, es una de las más frecuentadas de toda la Sierra de Gredos, debido a que sin nieve, salvo el desnivel y terreno pedregoso, no presenta muchas dificultades (más allá del excesivo calor en verano ya que no hay sombras), siendo apta también para niños acostumbrados a caminar. En invierno la cosa cambia, ya que con nieve o hielo es casi obligatorio el uso de crampones, y si hay niebla llevar gps y saber orientarse bien.
2. Cómo llegar.
La ruta parte de la Plataforma de Gredos. Para llegar hasta ella hay que ir a la localidad de Hoyos del Espino por la carretera AV-941. Una vez en esta población, se toma un desvío bien señalizado desde la carretera que atraviesa el pueblo hacia la Plataforma de la Sierra de Gredos, por la AV-931. Este desvío es inconfundible, ya que en el mismo hay una estatua de la cabra montesa de Gredos. Tras unos 12 km después de tomar este desvío llegamos a la Plataforma.
Desde el mirador comienza un descenso más pronunciado en dirección a la Laguna Grande. Al poco de comenzar este descenso, dejamos a nuestra izquierda la otra fuente del recorrido, la Fuente de los Barredones. Esta bajada la tuvimos que hacer con cuidado, ya que había algunos pequeños tramos de hielo y nieve derretida, por lo que había riesgo de resbalones al no llevar los crampones, pero en general fuimos sin problemas.
En total empleamos unas 5h 20', con paradas incluidas, en un recorrido de unos 12,3 km.
3. Descripción de la ruta.
Aprovechando un día libre en el que podíamos coincidir Miguel y yo, planeamos una ruta fácil hasta la Laguna Grande de Gredos. Aunque era mes de febrero, las previsiones eran de buen tiempo. Como es lógico preparamos todo el material invernal, ya que aunque no había sido hasta el momento un invierno de muchas nevadas, en la web del refugio Elola lo aconsejaban.
Como es habitual, Miguel que venía desde Plasencia y yo desde Toledo, quedamos enfrente del bar que hay al poco del desvío hacia la Plataforma de Gredos a las 08:15. Desde allí nos fuimos en un solo coche hasta dicha Plataforma. Tras preparar el material , ponernos los crampones (el inicio del camino pedregoso como es lógico por estas fechas era hielo puro) y hacer alguna foto, comenzamos la ruta minutos antes de las 09:00 h.
Inicio de la senda helada. Miguel se puso hasta casco |
La dureza del hielo permitía buen agarre de los crampones |
El camino es claro y comienza ascendiendo paralelo al río Prao Puerto, el cual vamos dejando a nuestra izquierda. Este primer tramo de cerca de 1 km es empinado y completamente empedrado, en nuestro caso alternábamos hielo y piedras. Durante este ascenso el camino serpentea a la vez que gana altura.
El trayecto por el momento está perfectamente delimitado, y señalizado con postes de madera, de modo que poco antes de terminar este tramo de subida existe un alto poste indicándonos la dirección a la Laguna Grande y Refugio Elola por un lado, y al Refugio de Reguero Llano por el otro.
Miguel a la altura del poste |
Continuamos la subida, y tras culminar las rampas alcanzamos una zona plana de hierba conocida como el Prado de las Pozas. Aquí el sol ya empezaba a darnos de frente, y en el recorrido alternaban zonas de nieve blanda con zonas de hierba. Por esta pradera anduvimos algo más de medio kilómetro hasta llegar al puente de cemento (algo antiestético) que atraviesa el Río Pozas. Dado que la nieve escaseaba en algunos tramos y la que había era blanda, decidimos echar los crampones a la mochila. Al lado de este puente se encuentran los bonitos cortados de las Paredes Negras.
Puente de cemento del Río Pozas (foto realizada a la vuelta) |
A partir de este puente, comenzamos a ascender por un recorrido no tan evidente como hasta ahora, pero que sigue bien señalizado, de forma que vamos ganando altura serpenteando hasta llegar a la Fuente de los Cavadores, situada a 2180 m. En la fuente paramos a beber agua fresquita.
Miguel bebiendo agua |
Por suerte en caño no estaba helado |
En la fuente de los Cavadores |
Al cabo de unos metros de ascenso llegamos a una zona divisoria e iniciamos un suave descenso, flanqueado por piornos, acercándonos poco a poco al paraje de los Barredones. La verdad es que para estar en febrero en pleno invierno esperábamos más nieve en esta zona, pero tan solo estaba cubierto levemente el sendero delimitado entre los piornos. Otras veces por esta zona la nieve cubre toda la zona de piornal.
La nieve tan solo cubre el camino. Los piornos se dejan ver |
Poco a poco íbamos caminando por el paraje de los Barredones y al fondo se asomaban las cumbres del Circo de Gredos.
Detrás de mi las cumbres del Circo de Gredos |
Unos metros más adelante, nos aparecieron unas vistas espléndidas del Circo de Gredos, cuando habíamos llegado a la altura del Mirador de la Peña del Rayo. En este mirador paramos a hacer algunas fotos y deleitarnos con el paisaje. Desde aquí contemplamos todos los picos, portillas y canales del Circo de Gredos, de izquierda a derecha: Morezón, Risco de las Hoyuelas, Tres Hermanitos, Casquerazo, Portilla de los Machos, Cuchillar de las Navajas, Almanzor, Almeal de Pablo, Galana, Risco del Gutre, Portilla del Rey, Portilla del Pluviómetro, Cabeza Nevada, etc. En la Garganta de Gredos también se pueden observar los restos de la morrena lateral del antiguo glaciar, el mayor de los que hubo en Gredos. La verdad es que nos estábamos tomando la ruta con tranquilidad, pero más o menos íbamos sobre el horario orientativo de los paneles, llevábamos 1h 40' de recorrido desde el inicio, con paradas incluidas.
Desde el mirador comienza un descenso más pronunciado en dirección a la Laguna Grande. Al poco de comenzar este descenso, dejamos a nuestra izquierda la otra fuente del recorrido, la Fuente de los Barredones. Esta bajada la tuvimos que hacer con cuidado, ya que había algunos pequeños tramos de hielo y nieve derretida, por lo que había riesgo de resbalones al no llevar los crampones, pero en general fuimos sin problemas.
Comiendo hielo |
Seguimos bajando hasta llegar a una zona conocida como Majada de Adrián, y tras una leve subida, volvimos a bajar de nuevo para quedarnos a las puertas de la Laguna Grande.
Muy cerca ya del objetivo |
Detrás de Miguel la laguna helada |
El último tramo hasta llegar a la Laguna Grande lo hicimos buscando la zona más cómoda, no seguimos necesariamente los hitos, poniendo las manos en alguna ocasión para sortear algunas rocas. Poco antes de llegar al inicio de la laguna, existe un cartel indicativo hacia la ruta de las 5 Lagunas.
Por fin alcanzamos la Laguna entorno a las 11:30, sobre el horario previsto, es decir, 2h 30' desde el inicio.
Pisando la laguna helada |
Miguel en la Laguna Grande |
Al fondo el Almanzor |
Como ya conocíamos el Refugio Elola, no nos planteamos bordear la laguna para llegar a él, tan solo la bordeamos un poco por su margen izquierda y buscamos un sitio para sentarnos y comer algo.
Aunque la laguna estaba helada, no nos ofrecía mucha confianza como para atravesarla. El paisaje era magnífico, pero mentiría si dijese que no nos defraudó la escasez de nieve (en la ruta publicada en este mismo blog "Circular Corta al Morezón", el Circo de Gredos estaba más imponente).
Selfie en la Laguna Grande |
En Laguna Grande estuvimos unos 40', tras los cuales emprendimos el retorno por el mismo camino de la ida. Aquí ya el sol apretaba bastante, por lo que nos sobraban gorro y guantes. Curiosamente hasta el momento no nos habíamos encontrado con ningún montañero.
A la vuelta antes de iniciar la subida a los Barredones nos encontramos con bonitos carámbanos en algunas zonas sombrías.
Bonita foto de los carámbanos |
Miguel al lado de los carámbanos |
Antes del inicio de la subida hacia los Barredones nos encontramos con un par de montañeros, los primeros del día, que amablemente nos hicieron una foto juntos.
Antes de iniciar la subida de vuelta a los Barredones |
Posando para la foto |
La subida hacia los Barredones se nos hizo algo durilla, pero sin problema llegamos al mirador. Desde aqui un poco más de subida hasta alcanzar la parte más alta de los Barredones, para luego iniciar ya el descenso hasta la Plataforma por el mismo camino de ida, pasando por la Fuente de los Cavadores y el puente de cemento del río Pozas.
A la vuelta en el puente del río Pozas |
Curiosamente a la vuelta a la altura de la Pradera de las Pozas, vimos un montón de mochilas verdes, y afinando la vista observamos que a lo lejos había un grupo de los GREIM con esquís de travesía, imagino que haciendo prácticas.
Mochilas de los GREIM en la piedra |
Sin más incidencias llegamos a la Plataforma sobre las 14h 20', yo especialmente con bastante dolor de pies, ya que llevaba botas rígidas y aún no las tenía "muy domadas".
Inicia de la senda a la vuelta |
En total empleamos unas 5h 20', con paradas incluidas, en un recorrido de unos 12,3 km.
Hay que decir que como comenté anteriormente, a pesar de que esperábamos más nieve, es una ruta clásica de Gredos, de bonitas vistas y fácil de realizar con buen tiempo. En época invernal llevando el material adecuado (crampones) es también relativamente sencilla. Si hay mucha nieve blanda también se puede realizar con raquetas de nieve. Pienso que con poca visibilidad puede resultar difícil orientarse si no se conoce la zona y no se dispone de ningún gps, por lo que hay que extremar las precauciones.
Aquí dejo unas fotos con la altimetría y el recorrido realizado:
Aquí dejo unas fotos con la altimetría y el recorrido realizado:
Comentarios